miércoles, 24 de febrero de 2010

SOBRE LA TRANSFORMACIÓN CURRICULAR EN LA MEDIA


Con muchos aspavientos, premura y desesperación vemos a la actual Ministra de Educación (hasta hace poco periodista) Lucinda Molinar, impulsar a nombre del gobierno unos supuestos “cambios urgentes” en materia educativa; persona improvisada en esta cartera y no idónea para hablar de políticas educativas, primero porque nunca ha sido docente, no tiene estudios de pedagogía, mucho menos de especialidad y no se le conoce ninguna trayectoria en este campo, siquiera desde el punto de vista como burócrata o cuadro de derecha en esta rama; además su papel es y ha sido el mismo de siempre: ser un instrumento, agente y vocera de los grandes empresarios y oligarcas pro-imperialistas de este país, con mentalidad y formas de producción reaccionarias, atrasadas y distorsionadas, de beneficio para ellos como minoría privilegiada y de explotación para las grandes mayorías.



Educación para la esclavitud del trabajo asalariado, del desempleo y el consumismo.

Estos grandes empresarios monopolistas, esta clase social minoritaria y bien caracterizada en nuestro país de latifundistas o terratenientes, comerciantes monopolistas y oligopolistas, oligarcas, políticos de derecha, imperialistas, traidores de la patria, traidores de nuestra historia de lucha irredenta como pueblo por nuestra autodeterminación, nuestra soberanía política y económica, gringeros de siempre (que insisten nuevamente en concretar tratados comerciales con los EU en detrimento de nuestra ya maltrecha economía, en detrimento de nuestros pequeños productores, en perjuicio de nuestra población campesina y del pueblo); aborrecen la organización de los trabajadores, y la verdadera educación de los obreros y de sus hijos, de los hijos del Pueblo que vendría a ser la toma de conciencia y la disposición de luchar por todos los medios y métodos, en contra de la explotación y del empobrecimiento al que nos han sometido injustamente, desde que se han asentado en este istmo hace más de 106 años y han venido usufructuado los medios de producción social, (es decir los capitales, puertos, canal, comunicaciones, cualquier medio en fin para producir la riqueza estableciendo relaciones sociales); han promovido para su exclusivo beneficio y de sus amos del norte, el comercio; han utilizado nuestra privilegiada posición geográfica como zona de tránsito y a la vez de punto convergente; han desarrollado este sistema semi-capitalista sumamente dependiente y deforme, basándonos en una economía terciaria o de “servicios” y la consecuente mentalidad de servidumbre con que verdaderamente educan y pretenden seguir educando a los hijos de la clase trabajadora, a través de los sistemas educativos, distintos en cuanto a la forma o presentación, empero iguales en cuanto a los contenidos mecanicistas, memorísticos, seudocientíficos, sosos, enajenantes, a-históricos, de espaldas al conocimiento y comprensión de los distintos estadíos del desarrollo humano.



Educación para ser plenos y libres como persona y para que nuestra patria goce de soberanía política e independencia económica.

Merecemos una educación que parta de nuestras características propias; que se ajuste a nuestras necesidades de verdadero desarrollo nacional; que sea acorde con un nuevo sistema económico, político y social que es tarea realizar, en donde se reconozca el esfuerzo intelectual y físico, la participación y la producción de los trabajadores todos, del campo y la ciudad, como creadores de toda clase de bienes y de valores que posibiliten una armónica y feliz convivencia humana; sistema y educación donde no predomine el egoísmo ni la “competencia”, sino la solidaridad y la colaboración recíproca; donde no se estimule como fundamental la acumulación de bienes materiales, sino una moral de vida, de convivencia y socialización que permita la edificación como persona; como ciudadano; como técnico, profesional, trabajador al servicio de la sociedad y por el mejoramiento de ésta.

Educación que debe incluir la enseñanza de nuestra verdadera historia como nación pluriétnica de trabajadores indios, mestizos, mulatos, negros y de mayorías populares que libraron y deben seguir librando verdaderas batallas por nuestra autodeterminación y por un proyecto de Nación; educación que se nutra de teorías y de sistematización para una correcta aplicación de la técnica y de la ciencia moderna, para desarrollar por nuestra cuenta, (y por intercambio con países hermanos en este similar proceso de autodeterminación y autosuficiencia), fuerzas productivas que nos permitan como país, dar un salto adelante en cuanto a la producción industrial, de energía y de alimentos para garantizar nuestra verdadera soberanía política e independencia económica.

Boris Sanchez - Responsable Político BPU

1 comentario:

  1. Amigo mío, al parecer las luchas que se avecinan serán arduas…, hay que estar preparados… El capitalismo en crisis es más peligroso que nunca… y tratará de mantener su estatus por todos los medios a su alcance…

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